¿Viajar sola? 5 aspectos a tomar en cuenta

 Hace unos años (antes de la pandemia) hice un viaje muy especial para mi, fue un viaje de un mes a Cusco - Perú, en el cual tuve la oportunidad de estar en un porcentaje del tiempo sola y en un porcentaje del tiempo con dos de mis mejores amigas. Ambas partes del viaje fueron experiencias únicas que me dejaron aprendizajes muy importantes y que en esta ocasión quiero compartir con ustedes.

1. Absolutamente todo es tu responsabilidad.

Se que este puede parecer un punto aburrido, sobre todo cuando estás en tus 20s y lo que quieres es aventurarte a la vida. Pero cuando sales de tu país sola es necesario que sepas que solo tú tienes la responsabilidad de tu bienestar. 

¿Tus documentos? Son tu responsabilidad. ¿El transporte hacia cualquier destino que desees visitar? Es tu responsabilidad. ¿El manejo del dinero? Es tu responsabilidad. ¿Tu seguridad? Es tu responsabilidad.

No quiero que esto parezca una charla de tu madre en la cual no puedes opinar, pero si es necesario que si planeas viajar sola tomes en cuenta que solo de ti dependerá que esta sea una experiencia satisfactoria y no una de la que te arrepientas. Eso me lleva al segundo punto.

2. Escucha los consejos que te den.

No digo que debas seguir todos los consejos que recibas ciegamente, pero si es bueno que tengas la mente abierta a ciertas sugerencias que pueden hacer la diferencia. 

Cuando viajé tenía 20 años y unos meses antes del viaje mi madre sugirió que contratara un seguro médico que cubriera cualquier necesidad que tuviera durante el viaje. En ese momento yo estaba costeándome el viaje en su totalidad y no quería tener que pagar un seguro médico que según yo "no necesitaría", así que ignoré el consejo y no contraté el seguro médico. A las dos semanas de estar en Perú me enfermé con una grave amigdalitis por la cual tuve que ser llevada al hospital, para cuando llegué llevaba más de dos días en cama por la fiebre y no podía pronunciar ni una sola palabra.

No quiero entrar en detalle acerca del valor que esta hospitalización tuvo y como cambió radicalmente mis planes de viaje, pero lo que si puedo decir es que debí escuchar a mi mamá.

3. Hay que estar preparada para lo inesperado.

Si bien al planificar un viaje una siempre espera que todo salga perfecto, tener solo días soleados, museos y atracciones siempre abiertas y restaurantes que sirvan comida deliciosa a un precio accesible para un mochilero, las cosas no siempre salen como nos hubiera gustado.

En mi caso en particular sucedió que el día que mis amigas y yo habíamos planeado tomar el tren a  Machu Picchu hubo un levantamiento indígena que sitió la ciudad de Cusco. Y aunque esto suena alarmante, en realidad dentro y fuera de la ciudad las cosas funcionaban con una relativa normalidad, el problema radicó en que la estación de tren se encontraba en las afueras de Cusco, en donde se desarrollaba el levantamiento.

A esto debo añadir que nosotras no estábamos enteradas del levantamiento, en el lugar donde nos hospedamos no había televisión, por lo que no teníamos acceso a las noticias locales. Por el horario de salida del tren, llegamos a la estación a las 4h00 de la mañana, y para nuestra sorpresa al llegar la estación estaba cerrada pues nuestro tren se había cancelado. Queríamos volver a Cusco, pero los únicos taxis disponibles querían cobrarnos $300 por un viaje de máximo 20 minutos de regreso a Cusco. Tal vez hubiéramos podido juntar el dinero entre las tres, pero eso nos ponía en una situación complicada, tomando en cuenta que nos quedaban todavía 3 semanas de viaje.

Al final logramos subirnos en un bus que pasó junto a nosotras en la carretera. 

4. Investigación.

Es importante que previo al viaje realices una investigación que te permita ir con una idea previa de las actividades que quieres realizar o los lugares que quieres visitar, de esa forma estarás preparada y tendrás una idea de los precios de las cosas, ya que en muchos lugares, la gente acostumbra cobrar extra a los turistas, aunque no sea un práctica aprobada por la ley.

En el caso de que desees hacer actividades de aventura como subir una montaña, revisa la predicción del clima. De esta forma podrás planificar el tipo de ropa que debes llevar para esta actividad, de igual manera, revisa si para realizar cierto recorrido es necesario que contrates a un guía del lugar y de ser el caso, cual es el valor que cobra este guía. En estos casos, una técnica podría ser sumarte a un grupo en el lugar para que entre todos pueda dividir el valor de los honorarios del guía y no tengas que pagarlo por tu cuenta.

Existe también en varios lugares tarjetas que te permiten por un precio más económico acceder a gran variedad de museos o lugares turísticos de la ciudad, de esta manera no tendrás que pagar por tickets individuales por cada lugar que desees visitar y ahorrarás un par de dólares.

5. ¡Atrévete!

Viajar sola puede dar mucho miedo. Estás en un lugar desconocido y completamente sola. Has escuchado mil historias de que a las chicas que viajan solas siempre les pasa algo malo. Pero déjame decirte que aunque en muchas ocasiones eso puede pasar, lo peor que puede pasarte es vivir encerrada y nunca intentar nada por vivir constantemente en miedo.

¿Tienes la oportunidad de viajar sola? Atrévete, te prometo que cada risa, cada llanto, cada dolor de pies, cada persona nueva que conozcas, cada platillo nuevo que pruebes y cada lugar nuevo que visites valdrá la pena.

No digo que no tengas cuidado, claro que debes tener cuidado y estar atenta a tu al rededor, pero el viajar sola, aunque tengas miedo, va a llevarte a conocerte a ti misma en un nivel que no puedes imaginar al menos que lo hagas.